María, La Gorda (Mar Caribe, Cuba)
En septiembre de 2013, regresé a María La Gorda, en Cuba, el lugar donde todo comenzó. La selva, la playa y el mar; corales que crecen hasta la orilla, y un poco más adentro, un inmenso arrecife con una pared que parece no tener fin, cayendo hacia el azul profundo. En medio de todo esto, un pequeño grupo de personas con un solo propósito: bucear. Así es María La Gorda.
La naturaleza ha trabajado durante milenios para crear este santuario, un refugio de paz para el alma, un lugar para reconectar con uno mismo y celebrar la vida. Aunque mi primera inmersión fue en La Habana, fue aquí donde realmente me encontré con el mar. Este reencuentro marcó el cierre de una etapa en mi viaje artístico submarino.
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